Y la mente otra vez vuelve a ocultarme cosas
para no lastimarme.
Pero cuando recuerdo, cuando lo vuelvo a ver
ya no se quien soy.
Las cosas más importantes se vuelven insignificantes
y mi razon se vuelve loca y no comprende nada.
A veces necesito gritarlo todo y a veces
prefiero llevarme todo esto a la tumba.
Y me cambia el animo y cambio de pensamiento
todos los días y no entiendo nada.
Pero a veces no alcanza con descargarse
y entonces no se que hacer.
Igual toda esta confusión queda dentro de
mi cueva, porque de ahí no puede salir.
No hay comentarios:
Publicar un comentario